El 16 de Junio es el Día Nacional de la Atención Temprana, y muchos de los diagnósticos de autismo nos llegan a las familias en las etapas tempranas de la infancia de nuestros hijos. Un día, de repente vas a la revisión pediátrica habitual y si tienes la suerte de tener al lado un profesional actualizado, os pasan un test (M-CHAT) y empieza el camino del autismo. Pero lo más probable es que haya sido detectado/a en la escuela infantil, ya que equipos de orientadores de Atención Temprana (ámbito de educación pública), suelen detectarlos en sus visitas a los centros, tras ser llamados por los educadores.
Estamos hablando de entornos de edades desde los 1 a los 3 años, aunque hay casos de niños con TEA que se les diagnostica a los 9 meses. Es muy probable que presenten una sintomatología muy severa y llamativa, lo que hace muy sencillo para un profesional el detectar a un niño y rápidamente que empiece a recibir tratamientos especializados de atención temprana.
Intervención temprana: ¿qué es?
La intervención o atención temprana es un término que significa comenzar las intervenciones terapéuticas lo antes posible. Para el autismo, la intervención temprana significa apoyo especializado para niños pequeños.
Pero legalmente, la atención temprana es un derecho para todos aquellos niños que la necesiten. La Atención Temprana es “el conjunto de actuaciones dirigidas a la población infantil de 0 a 6 años, con objeto dar respuesta, de la forma lo más inmediata posible, a las necesidades que presentan los niños y niñas que presentan trastornos en el desarrollo o con riesgo de padecerlos”.
Por lo tanto, la intervención temprana es apoyo especializado para niños con discapacidad , autismo u otras necesidades adicionales, incluido el retraso en el desarrollo. Si no se interviene con tratamientos de atención temprana, las consecuencias de esta omisión, pueden afectar el futuro de la persona con TEA.
En este sentido, hay que ser muy claros, pues la intervención temprana debe ocurrir tan pronto como sea posible después de que se identifiquen las necesidades del niño o niña. Puede incluir terapias, apoyos, recursos en educación, etc. Normalmente todo tiene que funcionar de una manera coordinada.
La hoja de ruta del desarrollo en el TEA
El neurodesarrollo humano en niños se refiere al desarrollo del sistema nervioso y el cerebro durante la infancia temprana. Durante este período, el cerebro y el sistema nervioso central (SNC) experimentan un rápido crecimiento y desarrollo significativos, lo que influye en su capacidad de aprendizaje, comportamiento y habilidades cognitivas y socioemocionales fundamentales, que sientan las bases para su desarrollo futuro.
Durante los primeros años de vida, los niños experimentan un rápido desarrollo cerebral. Las conexiones neuronales se forman y se fortalecen a medida que el niño interactúa con su entorno y experimenta nuevas experiencias sensoriales y motoras. Esto incluye el desarrollo de habilidades motoras gruesas y finas, como gatear, caminar y manipular objetos, etc…
Además, durante este período, los niños desarrollan habilidades cognitivas y de lenguaje. Comienzan a adquirir el lenguaje y a utilizarlo para comunicarse con los demás. También desarrollan habilidades de pensamiento, memoria y resolución de problemas, lo que les permite comprender y responder al mundo que les rodea.
El neurodesarrollo en los niños pequeños también está estrechamente relacionado con el desarrollo socioemocional. Durante esta etapa, los niños comienzan a comprender y regular sus propias emociones, así como a desarrollar habilidades sociales, como la empatía y la interacción con sus pares.
Es importante tener en cuenta que el neurodesarrollo es un proceso individual y puede variar de un niño a otro. Algunos niños pueden alcanzar hitos del desarrollo antes o después que otros, y esto puede deberse a una variedad de factores, como la genética, el entorno y las experiencias individuales.
La pirámide del desarrollo de Lázaro y Berrueco (2009) es un modelo conceptual que representa las necesidades y prioridades del desarrollo infantil en forma de una pirámide. Este modelo fue propuesto por los psicólogos españoles Antonio Lázaro y Laura Berrueco y se basa en la idea de que el desarrollo de los niños se sustenta en una serie de necesidades fundamentales.
Según el modelo de Lázaro y Berrueco, el desarrollo infantil ocurre de manera progresiva y secuencial, y cada nivel de necesidad debe ser satisfecho antes de que el niño pueda avanzar al siguiente nivel. Además, se destaca la importancia de una base sólida en los niveles inferiores para un desarrollo saludable en los niveles superiores.
En Fundación ConecTEA explicamos a las familias este modelo como una hoja de ruta en el autismo, pues proporciona una guía útil para comprender las necesidades y prioridades del desarrollo infantil, destacando la importancia de atender las necesidades básicas, emocionales y sociales de los niños para asegurar un crecimiento y desarrollo adecuados.
Los tratamientos de atención temprana en el autismo
La intervención temprana en la primera infancia en el caso de personas con autismo es un objetivo primordial, para ayudar a aprender las habilidades que necesita cualquier niño o niña en el desarrollo.
La intervención temprana para el autismo debe comenzar lo antes posible. Para algunos niños esto puede significar comenzar a los 12 meses, para otros puede ser a los cinco años. Lo principal es comenzar tan pronto como se noten problemas con el desarrollo.
En el caso del autismo, las intervenciones que consideramos importantes en Fundación ConecTEA pueden ser:
- LENGUAJE Y COMUNICACIÓN: Desde el servicio de Logopedia y el área de Audición y Lenguaje, se trabajan las diferentes competencias de la comunicación y el lenguaje, facilitando orientación y asesoramiento a las familias .
- TERAPIA OCUPACIONAL: La Terapia Ocupacional es el conjunto de técnicas, métodos y actuaciones que, a través de actividades aplicadas con fines terapéuticos. Especialmente esta actividades cobran relevancia en cuando hay un enfoque de integración sensorial, pues el 90% de las personas con TEA tienen dificultades de procesamiento sensorial, y si vemos la pirámide de Lázaro y Berrueco, pues vemos que son la base de la pirámide, y que eso convierte a esta terapia en una gran influyente en el desarrollo.
- APOYO Y TERAPIA CONDUCTUAL: Se da poyo a las familias para saber cómo tratar y redirigir todas aquellas conductas de las personas con autismo que interfieren en la vida cotidiana o en su entorno.
- HABILIDADES SOCIALES: Desde Fundación ConecTEA queremos abordar el aprendizaje de las Habilidades Sociales en las personas con TEA (Trastorno del Espectro Autista), facilitando su interacción con el entorno y la mejora de sus estrategias adaptativas, en las que la gestión emocional y la autorregulación son elementos muy importantes.
Cómo debería ser una intervención temprana ideal
Como todas las familias, padres, madres o tutores responsables de personas autistas, no sabemos al principio si los tratamientos de atención temprana son adecuados y cumplen unos indicadores mínimos de calidad, incluso puede ocurrir que a veces lo esperado por una familia se base en opiniones de otros o en creencias propias. Aquí hay algunos puntos clave sobre qué deberíamos esperar en un servicio de intervención temprana :
- Debe estar basado en evidencia, lo que significa que se ha demostrado científicamente que es efectivo. Hay terapias y tratamientos que no están basados en las evidencias científicas, o incluso que se confunden porque no son tratamientos terapéuticos. Algo tan básico como si es un terapeuta el o la que realiza la terapia, debemos preguntarlo, así como sus competencias profesionales. Esto ya lo hemos comentado con anterioridad en varios artículos, pero sigue pasando.
- Centrado en el niño y apropiado para el desarrollo. Todas las terapias que se apliquen tienen que tener objetivos concretos relacionados con el desarrollo. No vale con que el niño o niña se lo «pase muy bien» o salga muy contento/a. ¿Qué objetivo perseguía la sesión? ¿Qué aspecto se ha marcado como objetivo?
- Centrado en la familia, trabajando hacia objetivos relacionados con la familia. La familia debe tener un rol activo, no pasivo. Recomendamos la lectura de este artículo de nuestra web sobre el modelo Centrado en la Familia.
- Individualizado al niño. «Individualizado» significa personalizado, incluso si se hacen actividades grupales, los objetivos son individuales y adaptados al momento de desarrollo de cada persona. Y luego hay que saber que incluso si existe un ratio 1:1, si los objetivos no son personalizados, la calidad de la terapia no es buena, porque no se adapta a lo que le ocurre a cada persona autista.
- Evaluaciones antes de comenzar, luego se toman datos y se mide el progreso. Esto también es algo superbásico para saber si es necesario cambiar de estrategias por el profesional que lleva a cabo la terapia. Para medir los resultados y saber si una terapia está siendo efectiva, se recomiendan periodos no inferiores a 6 meses.
- Utiliza refuerzo positivo. Las terapias deben ser motivadoras para la persona que las recibe, buscando sus intereses y el juego como herramientas para retener el aprendizaje, ya que es una de las mejores maneras de anclarlo.
- Adopta un enfoque basado en las fortalezas
- Desarrollo profesional continuo del equipo que aplica la terapia. Esto es muy importante, los profesionales deben actualizarse en conocimientos que emanen de la investigación científica, que va proporcionando avances y mejoras con el paso del tiempo.
- Reuniones periódicas con la familia para seguir el progreso y resolver problemas, que deben estar al tanto de los objetivos como ser parte de las soluciones, promoviendo la creación de redes de apoyo y la generalización de los aprendizajes de su hijo/a.
- Generalización del aprendizaje: hay que asegurar niño pueda practicar y usar nuevas habilidades en muchos entornos (p. ej., el hogar, la escuela, la comunidad), no solo en el entorno de la terapia, o con el mismo terapeuta, ya que eso no es de utilidad para el futuro, especialmente en personas autistas, ya que pueden ser más rígidos frente a los cambios.
Esperamos que este artículo haya servido para aclarar aspectos básicos que todas las familias deberíamos saber sobre la atención temprana. En Fundación ConecTEA apoyamos la atención temprana como elemento clave en el tratamiento de personas con autismo, siendo conscientes de su gran influencia en el neurodesarrollo en la infancia. Para nosotros, la atención temprana cambia vidas.
¿Conocías la pirámide del desarrollo de Lázaro y Berrueco? Si tienes alguna pregunta sobre atención temprana, puedes escribirnos a info@fundacionconectea.es o dejarnos un comentario.
Estamos #JuntosenelAutismo
Referencias:
- Libro Blanco de la Atención temprana. Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. Documentos 55/2005. (Año 2000).
- Protocolo de Coordinación de Atención Temprana en la Comunidad de Madrid.
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